La representante a la Cámara, Carolina Giraldo, dice que “la tercera es la vencida”, refiriéndose a su decisión de radicar por tercera vez el Proyecto de Ley que busca prohibir las llamadas ‘terapias de conversión’, destinadas a cambiar la orientación sexual de una persona mediante métodos de “tortura, discriminación y maltrato físico y psicológico”.
La representante por el Partido Alianza Verde, Carolina Giraldo, dice que lamentablemente la práctica es una realidad en Colombia, no obstante muchos piensen que hace parte del imaginario colectivo o que son inventos literarios. Por tanto, insistirá en que el Proyecto sea discutido en la Cámara de Representantes, teniendo en cuenta algunos cambios como las penas, para que no sean tan altas.
En todo caso, la representante Giraldo cree que es necesario acabar con acciones en busca de conversión sexual, que sólo generan ansiedad, depresión e ideación suicida.
Jorge Andrés Grajales Arenas, psicólogo y magister en Sexología Clínica y Educativa, precisa que no existe posibilidad alguna de cambiar la preferencia sexual de una persona a través de la crianza o de terapias, como las que pretenden la conversión por medio de la tortura física o psicológica. Esto sólo va a producir -asegura en ClickCracia y en Sinergia Informativa- controles violentos y represiones que van a reventar más adelante en la vida de la persona intervenida con estas terapias.
El Proyecto de la representante Giraldo ha tenido apoyo de personas que insisten en que no hay “nada que curar” con las llamadas “terapias de conversión” que pretenden cambiar la identidad u orientación sexual de personas LGBTIQ en Colombia. Sin embargo, tuvo en el segundo intento el rechazo de personas que hablan de atacar “la libertad de culto”, como el representante por el Partido Conservador, Luis Miguel López -quien opinó que “el tema punitivo sería válido para tratos crueles, pero no para quienes no compartan ideologías de género“-, o el representante Miguel Polo Polo -quien manifestó que el Proyecto respondería a una “agenda ideológica” y que, además, “afectaría la libertad de culto y a las iglesias”-.
Voces como las de la representante Martha Alfonso han respaldado el Proyecto diciendo que no es violatorio de la libertad de culto y de Santiago Osorio, quien no están en contra de las libertades religiosas sino a favor de respetar la dignidad humana.