Esa banda nació en las cárceles de Venezuela y se ha extendido por varios países latinoamericanos, como Colombia, Perú, Bolivia y Chile, donde las autoridades la acusan de cometer numerosos delitos, como narcotráfico, extorsión, secuestros y homicidios.
La embajada de Estados Unidos en Colombia y la Policía colombiana ofrecen un total de 12 millones de dólares por la captura de tres líderes de la organización criminal.
Los tres cabecillas de la organización son Giovanny San Vicente; Yohan José Romero, alias Johan Petrica, y Héctor Guerrero Flores, alias Niño Guerrero, por quienes se ofrecen recompensas de tres, cuatro y cinco millones de dólares, respectivamente.
A los tres se les acusa de delitos de conspiración para cometer crímenes, tráfico de narcóticos y de personas, y lavado de dinero.