La Fundación Ideas para la Paz (FIP), que cita cifras del Ministerio de Defensa y de la Defensoría del Pueblo, dice que desde el 2018 el aumento de sus integrantes del Clan del Golfo ha sido del 95 %.
Pasó de tener influencia en 179 municipios de 10 departamentos, a estar en 238 municipios de 16 departamentos. En 2018 tenía cuatro bloques y 22 frentes, hoy “tiene seis bloques y 34 estructuras. Hoy sus principales zonas de expansión son Chocó, el Magdalena medio, sur de Bolívar y la costa Atlántica”, dice la FIP.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, autorizó en agosto pasado abrir un “espacio de conversación sociojurídico” con el Clan del Golfo, heredero de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), para fijar los términos de sometimiento a la justicia en los términos permitidos en la Ley, pero aún no ha comenzado.
Al contrario de las otras tres mesas de negociaciones instaladas -con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y con una parte de las disidencias de las FARC del Estado Mayor Central (EMC) y con un grupo escindido de la Segunda Marquetalia- se trata de un espacio de conversaciones sociojurídicas, ya que el Gobierno no le reconoce a las AGC un estatus político.