Acostumbrado desde que llegó al banco técnico Alberto Gamero a ser protagonista de primer orden, Millonarios, después de varios partidos en los que generó dudas, se reencausó y con su primera victoria ayer fuera de casa, ante Envigado, se afianzó en la quinta plaza del Torneo Finalización.

Los azules se impusieron por 2-1 a los naranjas, que este semestre no han tenido un buen desempeño y marchan últimos en la tabla de posiciones, con tan solo 8 puntos de 42 posibles.

Águilas Doradas, que junto a los celestes lleva tres semestres siendo uno de los mejores equipos de la liga, se mantiene al tope de la clasificación con 27 unidades, seguid por América con 25, Nacional con 24 y Medellín con 22, los mismos que los dirigidos por Gamero.

En el compromiso de ayer, Daniel Zapata se encargó de abrir la cuenta para el dueño de casa, mientras que la visita consiguió la remontada a partir de las anotaciones de Larry Vásquez y Beckham Castro.

En el duelo, que debió disputarse el domingo a las 4:00 p.m., pero debió ser pospuesto para ayer en la mañana a causa de un fuerte aguacero y luego por deficiencias en las luminarias, los capitalinos tuvieron una notoria superioridad, aunque como ya le ha ocurrido en otros cotejos, no pudieron traducir ese dominio en el marcador.

Por el contrario, los locales aprovecharon la primera clara que les quedó para abrir la cuenta, cuando transcurría el minuto 33. Daniel Cataño, que justo había recibido un empujón de Felipe Jaramillo, perdió un balón contra la banda, el capitán local jugó de primera para Daniel Zapata, quien se acomodó y soltó un misil de pierna derecha que dejó sin reacción alguna al arquero Álvaro Montero.



 

Para colmo de males, segundos después, el juez central Edwin Trujillo, sancionó pena máxima en favor del local por un supuesto cruce de Andrés Llinás contra Bayron Garcés. A raíz de lo anterior, desde el VAR le pidieron revisar la acción al árbitro y este, en una rápida asistencia, desestimó la infracción.

Millonarios no encontró los caminos sino hasta la segunda parte. En el entretiempo, Gamero movió su equipo: Jorge Arias y Mackalister Silva ingresaron en lugar de Omar Bertel y Ricardo Rosales, respectivamente. Y en la primera acción del complemento llegó la igualdad. Juan Carlos Pereira capturó un rebote al borde del área y se la dejó servida a Larry Vásquez, que clavó su remate en el ángulo.

La visita pudo sellar la remontada con dos acciones de Juan Pablo Vargas en el juego aéreo, pero en ambas oportunidades brilló el guardameta Joan Parra, quien se fue convirtiendo en figura.

Cuando transcurría el minuto 71, Beckham Castro, quien acababa de ingresar por Edgar Guerra, recibió un pase largo de Pereira y dentro del área definió con un buen golpeo de pierna izquierda. 

Millonarios, que optó por no contratar jugadores para este torneo y que ha aprovechado algunos partidos para dar minutos a los canteranos, de poco a poco va recuperando su nivel de juego, aunque todavía no es continuo.

Además, por momentos el equipo se parece al que cautivó con un juego brillante, con mucha tenencia de balón y presencia constante en el área rival, pero con dificultades para definir.

Millonarios es mucho más efectivo cuando acude al juego directo. Sin embargo, en el transcurrir de los partidos no siempre acude a este tipo de juego y en cierta forma eso lo explica el hecho de que el técnico Gamero busca una mezcla entre los dos estilos para que su equipo juegue bien y sea efectivo, pensando en los compromisos del próximo año.

En la fecha 15, Millonarios jugará como local frente al Unión Magdalena, conjunto que busca cupo entre los ocho y salvarse del descenso.

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